sábado, 5 de noviembre de 2011

"Si yo me dejara llevar por un amor de otro sendero..." 
Así comienza una de mis canciones que descubrí recientemente que me gusta, es del disco Mil canciones de La  Muza, la canción del mismo nombres es una especie de resignación, con un futuro incierto y un poquito de desconfianza. 


Desconfianza, eso es lo que más "gusta" dice mil verdades, una perdida de tiempo, un mensaje más para demostrar que a pesar de los años, los amores hieren y cueste confiar en 3ras personas,


"A veces quiero sonreír hay veces que quiero llorar" continúa la canción y no hay nada mas cierto que en esta soledad, siempre acompañada, en una madrugada se llene de nostalgias, absurdas, fastidiosas y redundantes, en la que provoca llorar y sonreír al mismo tiempo, regalar insultos por doquier. 


El problema está en confiar, dejase llevar como dije al principio, a regalarle sonrisas a quien de verdad se las merece, a disfrutar una noche sin recordar. 


Dar el paso, así sea el mas difícil de dar.


Confiar.